FICHA TECNICA | |
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Fecha: | 20 y 24/12/2015 |
Distancia: | en total unos 23 km |
Desnivel positivo: | ?? m |
Dificultad: | Fácil |
Tiempo Invertido: | demasiado |
Se acostumbra a cerrar un año cenefo de dos maneras: la primera con una comida de hermandad y otra subiendo a la Sierra del pueblo. 2015 no ha sido una excepción, aunque esta crónica sea escrita en 2016 y parece que haya pasado una auténtica eternidad.
Fue allá por el 20 de diciembre, domingo,
cuando nos citamos para dar una vuelta por Juslibol Fer, Ángel, Miguel Ángel,
Luis y esta vez Javi que bajó del pueblo para sumarse a la fiesta. Fue aquella
una mañana fría, con esa niebla que suele cubrir Zaragoza los últimos días del
año. Tanto, que esa Torre del Agua, que era el punto de encuentro y partida,
apenas era una sombra. Salimos para
Juslibol, tomando la pista paralela al río, con ganas de pasar un buen rato.
El camino nos resultaba conocido de las
nocturnas. Un camino jalonado a esas horas, no tanto de los moviditos coches
nocturnos, sino de runners, ciclistas y otras especies domingueras. Cuando
giramos hacia los galachos, encontramos enseguida una pequeña caseta para
avistar aves. Fue ese el punto para reponer fuerzas con algo de vino, algo de
pescado y algún dulce típico de Morata (concretamente de las fiestas de San
Roque). Poco almuerzo pero más que justo
para lo poco que se había andado. Tampoco fue mucho lo que nos detuvimos porque
el día no invitaba a las pausas.
Pasados los Galachos, se ascendió por la
escalera a la parte alta de los montes erosionados típicos de esta zona y de
allí, perdiéndonos más de una vez, tiramos para Juslibol. Fue llegar allí y
busca el Tinajo de Juslibol. Para reponer… Sin embargo la cosa se complicó más
de lo debido. Incluso se decidió que el próximo año podría ser el punto y
final.
Así que después de aquello, fue duro
llegar hasta La Cantera, pero mereció la pena. Buena comida de hermandad y
decisiones de calado. Hemos nombrado a Luis I dinamizador del grupo para ver si
nos mete algo en vereda que estamos más que dispersos últimamente.
A esa comida, le siguió el día 24
(Nochebuena… parece que fue hace muuuucho) una subidita a la sierra. En Morata
esperaban Fer y Luis I, y un espontáneo Pablo que nos hizo sentir algo más
veteranos de los que somos, a Rafa y Luis II que llegaron desde Zaragoza.
También la mañana estaba con niebla, aunque en poco pudimos comprobar que la
cosa se aclararía en la cumbre (en el Pico Tordello). Fue una subida plácida, a
ritmo navideño para ver ese belén y esa cruz que adornan el pico. Dimos gracias
como corresponde, por un año más y pedimos porque la salud nos acompañe en este
y nos permita llenar caminos de amistad y buena conversación, y de paso nos ofrezca
buenos almuerzos. ¡Qué así sea! Tuvimos tiempo de bajar y dar cuenta de un
pequeño vermú al que se llegó a sumar a última hora Raúl. Compañeros… Feliz 2016.
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