domingo, 15 de marzo de 2009
La calcetinada. Tauste.
A las 7.30 h en marcha hacia Tauste. El precalentamiento de Rafa ejemplar. Ha trabajado duro esta semana y los excesos se pagan. Ya nos esperaba Carlos, para enseñarnos el puntalico al que había que subir. Un poco lejos parecía la cosa, pero el orgullo cenefo se impone y dejamos la furgoneta en casadios. A las 8.34 h, tiramos para allá: llaneando, llaneando, llaneando.... hasta el pie del puntalico, que de cerca es un poco puntazo.
Pasamos de eses y tiramos por lo recto. Esto es lo peor, pero la cosa se aguanta. Cuando volvemos a la pista, la cosa ya se hace más suave. Son las 11.15 (2h 40min subir) cuando llegamos por fin al santuario de Sancho Abarca (hay teorías sobre si será San Xo Abarca). Allí arriba lo de siempre: vino, embutidos, tortilla, pimientos con atún (esto es nuevo) y fruta. Estamos un rato disfrutando del paisaje de las Cinco Villas y las Bardenas y tiramos para abajo a las 11.50. Tras un debate, optamos por una senda que se veía desde arriba y que al llegar se convierte en un hermoso barranco. El orgullo cenefo se quiebra un poco cuando llegamos abajo y se ve el largo trecho queda a la par que valoramos lo que espera en casa. Así que tiramos de tecnología para hacer más rápida la vuelta, que al cenefo le sobran recursos. Total de la andada (efectiva): 4h 24min
Hemos aprendido varías cosas. Hay que medir las fuerzas. Hay que hacer caso al que sabe. Hay que avisar antes de que la rozadura llegue a tal. Hay que llevar tiritas.
Y por último sección de agradecimientos:
A Jesús, que nos ha enseñado lo que es una calcetinada y nos ha librado (algo) de ella.
A Montse, que nos ha aliviado la calcetinada.
Hasta la próxima.
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